Mario Alejandro Duarte Orozco es docente y catedrático en la Facultad de Educación y en la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de la Universidad de La Guajira, en Fonseca, Colombia. Dicta cátedras en investigación y trabajo de grado, lo que le ha brindado cercanía con Turnitin, así como con las posibilidades que brinda al proceso investigativo y de creación de conocimiento.
Sociólogo de profesión con Maestría y especialización en Educación, Mario Alejandro fue joven investigador de Colciencias. Desde 2015 es docente en la Universidad de La Guajira, inicialmente en la Facultad de Ciencias de la Educación y luego en la Facultad de Ciencias Sociales.
En su trayectoria docente, se ha desempeñado como docente de investigación y de trabajo de grado, lo que le ha permitido brindar acompañamiento a los estudiantes en su proceso formativo. Su intención como docente es que los estudiantes vean en él a alguien que los acompañará y orientará en lugar de simplemente calificarlos.
Además de Turnitin, utiliza diversas herramientas como asesorías presenciales y virtuales para apoyar a sus estudiantes. Les proporciona rúbricas, orientaciones, material bibliográfico y ejemplos de otros trabajos. También abre espacios de conversación y formación para reconocer errores y limitaciones, pues él mismo se considera en un constante proceso de aprendizaje y desaprendizaje.
Actualmente, trabaja en temas de masculinidad, paternidad y maternidad en edades tempranas, explorando su intersección con la educación. Por ejemplo, en un capítulo reciente relacionado con los imaginarios de la paternidad y maternidad tempranas en contextos educativos en La Guajira, fruto de una convocatoria del Ministerio de Educación de Colombia y la Universidad de los Andes.
Metodología para el contexto
A lo largo del semestre, Mario Alejandro observa cómo los estudiantes superan sus miedos y limitaciones hacia la investigación y el trabajo de grado, tomando el camino hacia la entrega de sus informes o el desarrollo de sus investigaciones. Esto es particularmente gratificante cuando se considera que sus grupos están compuestos por estudiantes de diferentes orígenes sociales y culturales, incluyendo un gran porcentaje de población indígena, no solo Wayuu —el pueblo más representativo de la región— sino también de otras comunidades.
Muchos estudiantes provienen de zonas rurales, dado que la sede de Mario Alejandro está en una sede provincial a dos horas de Riohacha, la capital departamental de La Guajira. Esto lo acerca a comunidades rurales, indígenas y dispersas en un territorio que fue zona de conflicto en el pasado.
Debido a las difíciles condiciones históricas de la región, Mario Alejandro recibe muchos estudiantes con deficiencias en lectoescritura, algo común en La Guajira, según muestran las pruebas estandarizadas nacionales como SABER. Además, la población enfrenta limitaciones económicas y de acceso a tecnologías, lo que afecta su desempeño académico.
A pesar, o quizás debido a esta realidad, muchos estudiantes muestran prejuicios hacia la investigación y el trabajo académico, considerándolos difíciles, aburridos e inútiles para su futuro. El desafío de Mario Alejandro es cambiar esa percepción y mostrarles cómo estas asignaturas les permitirán poner en práctica habilidades importantes para contribuir a sus comunidades por medio de su desarrollo profesional. Para satisfacción de Mario Alejandro, muchos continúan con estudios de especialización y maestría.
“Si el estudiante no tiene esta habilidad, debe aprender a escribir, redactar, indagar, preguntar y hacer observaciones, incluida la inmersión en campo. Es importante que entienda que puede contribuir a su comunidad, barrio o localidad, y que, según su perfil, puede mejorar ciertas condiciones allí.”
El camino a la creación de conocimiento
En los primeros encuentros Mario Alejandro socializa la guía propedéutica, permitiendo a los estudiantes hacer propuestas y acordar tiempos y actividades. Se abordan aspectos éticos en los procesos investigativos y escriturales, como el plagio, los estilos de citación, el parafraseo y las referencias. También discuten sobre los derechos de autor y la propiedad intelectual, así como los principios éticos que la Universidad promueve.
El objetivo de Mario Alejandro en esta etapa es sensibilizar éticamente, más allá del uso de Turnitin. Se busca que los estudiantes comprendan cómo sus conocimientos y experiencias educativas se reflejan en sus trabajos académicos, y cómo estos pueden dialogar con otros saberes a través de publicaciones y participaciones en eventos académicos, por ejemplo.
Al final del proceso, se busca que los estudiantes se sientan orgullosos de su trabajo final, contemplando el proceso de mejora desde el borrador inicial. Para Mario Alejandro, la satisfacción de superar barreras y prejuicios, y la capacidad de producir conocimiento y construir documentos académicos éticos, son aspectos fundamentales en la formación.
“Lo fundamental es que los estudiantes puedan producir conocimiento, analizar información y construir documentos académicos éticos que dialoguen con otros saberes disponibles en la sociedad del conocimiento.”
Al principio, Mario Alejandro confiesa que enfrentarse a expresiones como "el profe lo que quiere es reprobarnos", y a la cancelación o postergación de la asignatura por parte de algunos estudiantes es difícil. Pero a medida que avanza el proceso, los comentarios se vuelven más positivos. Algunos preguntan cómo mejorar su trabajo o reconocen que matricular la asignatura fue una buena decisión. Otros no entienden por qué las asignaturas cargan con el estigma de la dificultad, pues han vivido el acompañamiento durante todo el proceso.
Aclarando conceptos de originalidad
Para Mario Alejandro, es fundamental explicar que Turnitin genera un informe de similitud, no de plagio, mostrando el porcentaje y tipos de similitud: problemática y no problemática. Por ello, explica en sus clases que la similitud no problemática ocurre al citar correctamente una frase o fragmento textual según normas como APA, Vancouver o Chicago. La similitud problemática es cuando falta la cita o está incorrecta, lo que podría constituir plagio. La determinación final de plagio la realiza el profesor apoyándose en la herramienta.
Algunos de sus alumnos se sorprenden al aprender que no se espera un 0% de similitud, ya que en trabajos académicos es necesario citar fuentes pero el plagio debe ser 0%. La plataforma arroja el informe, y es tarea del profesor identificar y corregir cualquier similitud problemática, orientando al estudiante en las correcciones necesarias.
Según lo anterior, Mario Alejandro considera que la originalidad surge de la capacidad de los estudiantes para generar nuevas visiones sobre un tema, partiendo de tres aspectos. Primero, en reconocer que se ha estudiado e investigado sobre el tema en diversos contextos. Segundo, en asumir una postura respecto a lo construido y lo observado. Tercero, en aportar análisis desde sus saberes, observaciones y referentes teóricos, más allá de simples citas o estadísticas. Así, la originalidad radica en hacer nuevas propuestas y generar visiones innovadoras, según sus competencias y la formación recibida.
Formando para la autorregulación
Comenzar a corregir y mejorar los trabajos puede ser una parte difícil del proceso, pues se deben señalar y corregir errores, lo cual puede resultar complicado al principio. Sin embargo, es importante recordar a los estudiantes que tienen las herramientas necesarias para mejorar. Después de la revisión inicial, el proceso se convierte en una tarea de lectura crítica, lo que les permite identificar problemas y evaluar la relevancia de la información propuesta. Además, es fundamental entender que ningún trabajo académico está completamente terminado, siempre se puede mejorar. Mario Alejandro también fomenta el trabajo en equipo, permitiendo la evaluación entre pares para ayudar a brindar retroalimentación constructiva, lo que facilita el proceso.
Con la autorregulación efectiva como meta final, Mario Alejandro considera que Turnitin facilitó el trabajo al evitar la revisión manual y tediosa de cada trabajo, permitiéndole concentrarse en el contenido y la estructura. Ahora puede dedicar más tiempo a leer detenidamente los trabajos, lo que le brinda una mejor comprensión de las habilidades y dificultades de sus estudiantes. Además, la retroalimentación se vuelve más profunda al poder realizar una revisión detallada de los documentos. Esto le ha permitido brindar mejores orientaciones y una retroalimentación más enriquecedora.
Por medio de su labor, algunos trabajos de estudiantes suyos han sido publicados en la Revista de Investigación Formativa, lo que les ha permitido acercarse a una experiencia genuina de generación de conocimiento al recibir comentarios más precisos de otros revisores y compartir sus logros con otros. Esta experiencia lleva consigo la gratificación del logro y la satisfacción de ver el progreso desde el inicio hasta la publicación de sus trabajos.
